DESMEMORIADOS |
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25/10/2007 |
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Sin memoria no hay cabeza y sin cabeza no queda persona. Cualquiera estará de acuerdo en que lo más cruel del Alzheimer es que la desmemoria destruye al individuo, anula su experiencia y lo convierte en carne catatónica sumida en constante perplejidad.
Imaginemos ahora que esa tragedia del tejido nervioso le ocurre a un país entero. La confusión de una amnesia alzheimer general. El olvido del pasado reciente asentado con rango de ley de punto final. Una historia oficial decretada por golpistas. El asaltante puesto al mismo nivel ético que el asaltado. Los apaleados de la historia teniendo que silenciar los cadáveres apilados en las fosas comunes de los paseos de irás y no volverás. El fascio consagrado bajo palio, sostenido por el clero fanático de los Principios Fundamentales del nacionalcatolicismo.
El club de los herederos del paredón quiere difuminar su delito. En otras geografías más civiles se juzga a los usurpadores. Aquí la sentencia es "el muerto al hoyo y el vivo al bollo". Donde priman los registros de la propiedad huye la poesía y desaparece el reparto de justicia. España es un campo de golf con demasiados huesos debajo. |
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